En la comunidad de Catalán, distrito de General Bernardino Caballero, el Comité Cristo Rey avanza en un proceso de fortalecimiento organizativo y productivo que simboliza el esfuerzo de sostener su funcionamiento como un espacio colectivo que colabore con el mejoramiento de la calidad de vida de socios y socias, así como de la misma comunidad.
Integrado por 14 personas, el comité se encuentra en una etapa de consolidación interna. La implementación de huertas para el autoconsumo, el manejo sostenible de los recursos naturales —agua, suelo y bosque—, y el impulso de un proceso de organización comunitaria se convirtieron en los ejes de su trabajo durante 2024 y 2025.
Como en gran parte de la zona, las familias enfrentan las consecuencias de años de prácticas agrícolas nocivas, con uso excesivo de agroquímicos que degradaron el suelo, que redujeron la biodiversidad y afectaron la productividad. En respuesta a esto, el comité apuesta por la recuperación agroecológica y por un modelo de producción que priorice la salud de la tierra y de las personas.

Un comité que se reorganiza y crece
Durante este año, el proceso de construcción de su plan organizativo permitió un avance significativo en la cohesión del grupo, superando dificultades internas. Hoy, con mayor confianza y capacidad de diálogo, el comité trabaja con un sentido más claro de pertenencia y propósito común, incluyendo acciones al interior del comité, con y para la comunidad Catalán, así como con instancias de gobierno de nivel local.
Recuperación de local y un nuevo impulso productivo
Con entusiasmo, el comité también inició los arreglos de su local, esta vez con un plan de actividades detallado, con responsables, fechas y requerimientos, como signo claro de revitalización organizativa y renovación de sentido y propósitos colectivos.
Este proceso es también una plataforma para discutir el futuro productivo de socios y socias, lo que les ha impulsado a plantearse la recuperación de la semilla de arveja, un rubro tradicional de la zona y antiguamente de renta de socios y socias. Al final de 2025, cuentan con semilla propia agroecológica para sembrar en 2026, para lo cual aplicarán técnicas e insumos agroecológicos, principalmente del suelo, durante el verano.
Con su plan organizativo en marcha y un renovado compromiso interno, el grupo se proyecta hacia un futuro más sólido, tanto en lo productivo como en lo comunitario.

Estas acciones forman parte del proyecto “Producción Agroecológica, Promoción de la Protección del Medio Ambiente y Creación de Redes de Familias de Pequeños Agricultores en el Departamento de Paraguarí”, cuyo objetivo es contribuir a la mitigación del cambio climático y a la seguridad alimentaria de familias rurales vulnerables.
El proyecto es implementado con el apoyo de Adveniat y CCFD-Terre Solidaire.
















