Desde la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy) manifestamos nuestra preocupación por el avance de un proyecto político totalitario que busca limitar/restringir/acallar las voces disidentes y críticas de su gestión.
Las organizaciones no gubernamentales estamos comprometidas con la transparencia y el control. Los 25 años de trabajo y compromiso de la Codehupy dan muestras claras de la apuesta en la construcción y el fortalecimiento del Estado de Derecho con políticas públicas fuertes con perspectiva de derechos humanos y de género.
En contraste, la ley promulgada de “control y transparencia” representa un retroceso preocupante y no tiene otra intención que la de perseguir y desprestigiar a las organizaciones de la sociedad civil y sus integrantes. Las acciones de parlamentarios y divulgadores oficialistas han demostrado claramente que el objetivo es “ventilar” para “matar civilmente” a los oenegeros.
Varias de las personas que integramos la sociedad civil hemos resistido y sobrevivido a la dictadura stronista y al crimen organizado, varias compañeras y compañeros fueron asesinados y desaparecidos en la lucha por un país libre y democrático.
Podrán poner muchas trabas, podrán perseguirnos pero no van a lograr paralizarnos para seguir investigando, denunciando y construyendo cultura cívica respetuosa de la democracia y de los derechos humanos.
Las instituciones que formamos parte de la Codehupy, algunas que nacieron hace más de 40 años, y otras en tiempo de democracia, reafirmamos nuestro compromiso de seguir unidos a los movimientos y organizaciones sociales en la lucha y la resistencia por un Estado Social de Derecho.
Coordinación de turno: Unidas en la Esperanza – UNES, Aireana y Asociación Callescuela.
Secretario Ejecutivo, Dante Leguizamón.