Por Verónica Serafini
Los programas de alimentación escolar juegan un papel clave para ayudar a los niños a desarrollar su potencial, tanto para ellos mismos como para sus madres y comunidades. Estos programas son implementados en la mayoría de los países del mundo, incluyendo los más desarrollados como Irlanda, Países Bajos y Japón.
Alrededor de 125 países del mundo cuentan con programas de alimentación escolar, incluyendo los países europeos, donde casi el 50% de su población infantil está cubierta.
Sus objetivos e impactos directos en la niñez y adolescencia son múltiples cuando se implementan de manera integral: garantizan el derecho a una alimentación adecuada, contribuyen a la permanencia de los estudiantes en la escuela, al aprendizaje y a la educación alimentaria.
Fuente: Revista Economía y Sociedad. N°80. CADEP
Imagen: Diario ABC Color