El coordinador de la Red de Justicia Fiscal de América Latina y el Caribe analizó la necesidad de avanzar en reformas tributarias en la región producto de las consecuencias económicas luego de la pandemia.
“América Latina tiene sistemas tributarios altamente regresivos” fue la idea centro del análisis que realizó el coordinador de la Red de Justicia Fiscal de América Latina y el Caribe, Adrián Falco, al referirse a los esfuerzos por avanzar en un pacto fiscal y reformas tributarias que buscan aumentar la recaudación en países de la región.
Bajo la observación del sociólogo, avanzar en una reforma tributaria debería ser el objetivo principal a nivel regional considerando la crisis actual. “Los números de la economía y de la pobreza y de la indigencia en nuestra región son paupérrimos, venimos de atravesar una pandemia muy dura, muy desagradable desde todo punto de vista, y se hace cada vez más evidente que necesitamos recursos para ponernos nuevamente de pie”, puntualizó.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, el coordinador afirmó que “la pandemia nos ha hecho retroceder casi 20 años en materia de inclusión social y hay que recuperar rápidamente eso, por supuesto, no depende solamente de buenas voluntades sino también del trabajo que hagan los gobiernos alrededor de eso”.
Para Falco contar con un sistema regresivo en la región se traduce en que “los impuestos que más recaudan son aquellos que están orientados al consumo y no así los impuestos que están orientados a gravar la renta capital o la riqueza. Chile no difiere mucho del resto de América Latina y el Caribe, de hecho, la evasión y la elusión fiscal que hay en Chile representa, por ejemplo, el 12 por ciento del presupuesto en salud o el 10 por ciento del presupuesto en educación y eso pasa en todos los países de América Latina”.
“A nivel regional según datos de la CEPAL el 6 por ciento del PIB regional es evasión de impuestos que es casi el 140 por ciento de lo que la región invierte en educación“, destacó el coordinador.
Entonces, como medida central a tomar según Falco está “volver a los sistemas tributarios más progresivos. Esto significa cobrarle más a los que más tienen y, por otro lado, es necesario tener transparencia en el manejo de las finanzas, en el manejo de la operación de los bancos, en el manejo de la administraciones tributarias, sobre todo acceso a la información”.
El coordinador de la Red de Justicia Fiscal de América Latina y el Caribe puntualizó además que “hay muchos residentes en otros países que no declaran lo que tienen en otros países, ese es dinero que no entra al fisco y lo mismo ocurre con muchísimos otros países de la región y una gran culpa de todo eso la tienen la gran red de guaridas fiscales que hay alrededor del mundo que facilitan esconder dineros del fisco y que no pueda ser alcanzado para poder ser gravado”.
Respecto a qué motivo generó que en la región exista un esquema tributario regresivo, Falco apuntó en contra de quienes establecen las reglas. “Sabemos que en América Latina hay una intención manifiesta de legislar a favor de las grandes corporaciones y de las grandes riquezas, sin ir más lejos Chile ha intentado una reforma tributaria que ha sido muy resistida, y ha sido muy resistida por los sectores de más alto poder adquisitivo”, señaló.
Gracias al poder económico de estos sectores que controlan medios de comunicación, se ha instalado en el imaginario popular que los impuestos son negativos para la población.
Falco planteó que se debe desactivar dicha narrativa porque contrario a lo que se cree habitualmente “los números nos dicen que quienes más roban son los que más tienen“.
Esto último, pues declaró que “el 60 por ciento del dinero ilegal que da vueltas alrededor del mundo se genera a través del comercio fraudulento entre empresas, casi el 35% de ese dinero ilícito es debido a delitos, tráfico de armas, tratas de personas y solo el 5% es corrupción política”.
“No quiero decir que no haya corrupción en nuestro países, lo que estoy tratando de decir es cuidado porque hay muchísimo dinero que da vueltas alrededor del mundo que no tributa impuestos que es dinero que viene del comercio fraudulento entre empresas vinculadas”, precisó Falco.
En ese sentido, Falco destacó que se quiera establecer en Chile un registro de beneficiarios finales ya que “nos muestran quien es dueño de qué y en dónde, y ahí vamos a poder tener mayor facilidad para gravar riqueza de aquellos que buscan ocultarla en paraísos fiscales”.
Además, como una segunda medida para cambiar las perspectiva frente a los impuestos, Falco propuso entregar mayor educación para que “en toda la región puedan comprender que cuando cruzan una calle y el semáforo funciona, cuando van a hacer un trámite a cualquier dependencia del gobierno y lo atienden y se lo resuelven, todo eso es el Estado y sin Estado no se puede vivir“.
Fuente: Diario UChile