Hoy la humanidad está severamente amenazada por el daño ocasionado por sus propias acciones. La situación en Paraguay es de las peores del mundo: padecemos eventos climáticos extremos; la actual sequía no tiene antecedentes conocidos, y compromete la totalidad del territorio nacional. La afectación a los ecosistemas incluye la pérdida de biodiversidad, la escasez de agua en superficie y subterránea, la mortandad de animales domésticos, y la pérdida de cultivos de alimentos y de las semillas necesarias para nuevos cultivos.
Ante este escenario, el gobierno, en lugar de combatir el problema para proteger la vida de todas las personas, promueve un modelo económico productivo que destruye nuestros territorios: arroceros que dejan sin agua a pueblos enteros y asesinan a quienes protestan; ganaderos que incendian montes y pueblos; sojeros que deforestan y envenenan cursos de agua, destruyendo todo a su alrededor. Todo esto ocurre sin consecuencias, debido a la corrupción que impregna la vida institucional del Estado.
Esta destrucción tiene responsables organizados en la Asociación Rural del Paraguay (ARP), sectores de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), la Unión Industrial Paraguaya (UIP), y las cúpulas de los partidos Asociación Nacional Republicana (ANR o partido colorado) y Patria Querida (PQ).
Pretenden engañar a la gente usando eufemismos como “cambio de uso de suelo” en lugar de deforestación, y proponen falsas soluciones como monocultivos de eucaliptus que agotan aún más las aguas y disparan los incendios, o biocombustibles cuya demanda aumenta las superficies degradadas.
Es urgente frenar esta catástrofe y plantear alternativas para construir un nuevo Paraguay que garantice la vida, respetando e incluyendo a las grandes mayorías que sufren las agobiantes miserias cotidianas en el campo y la ciudad.
Este gobierno ha dado claras muestras de ignorancia y desprecio por la vida humana y de todo ser vivo. Por ello exigimos que se convoque a personas idóneas que puedan hacer frente a la emergencia y crisis. Es inaceptable que, ante estas catástrofes, representantes de este gobierno sigan negando el Cambio Climático.
Alentamos a nuestros compatriotas a manifestarse enérgicamente contra la negligencia del gobierno, a luchar por la conservación de los bienes naturales que hacen posible nuestra existencia. Como dijo el Dr. Francia, “los días nos enseñaron que el único peligro para la República es no tener confianza en nuestras propias fuerzas”.
Firmantes:
Decidamos, Campaña por la Expresión Ciudadana
MCP (Movimiento Campesino Paraguayo)
Asociación OÑONDIVEPA
Asociación de Mujeres Campesinas y Populares – AMUCAP-C
Callescuela
Organización ICSO
CODEHUPY
TEDIC
Federación Nacional Campesina (FNC)
Organización Cultiva Paraguay
Leo Rubín
Organización Sunu de Acción Intercultural
CTCU
Iniciativa Amotocodie
Organización de Lucha por la Tierra – OLT Paraguay