Por Soledad Villagra Carrón, mayo 2021
DECIDAMOS
Luego de 5 años, este mes Paraguay fue nuevamente examinado por los países integrantes de Naciones Unidas, reunidos en el Consejo de Derechos Humanos, sobre su situación en materia de derechos humanos, como lo ha sido en forma periódica, ya en el 2016 y antes, en el 2011.
El Examen Periódico Universal o EPU, por el que pasan todos los Estados, sin excepción, desde el 2006, en Ginebra, y ante el reformado Consejo de Derechos Humanos de la ONU, constituye el foro más visible que mide cómo va la situación de los derechos humanos en todos los países del mundo, basándose en las obligaciones y compromisos internacionales que han asumido ante las Naciones Unidas.
Para entender cómo funciona este mecanismo, hay que remontarse a sus orígenes. La antecesora del Consejo de Derechos Humanos, la Comisión de Derechos Humanos, fue creada en el 1946, bajo el Consejo Económico y Social (ECOSOC) por un mandato de la Carta de las Naciones Unidas, con representantes estatales. La Comisión de Derechos Humanos (junto a la Subcomisión de DDHH, de expertos independientes) durante 60 años cumplió una labor muy importante para enfrentar violaciones de derechos humanos, en especial las masivas y sistemáticas, además de edificar todo el conjunto de instrumentos jurídicos internacionales para la protección de los derechos humanos y los órganos de control y promoción de la aplicación de estos instrumentos. Con el tiempo, la Comisión fue criticada por tener procedimientos selectivos y de doble estándar en los países bajo su observación, lo que dio lugar a un proceso de reformas de los organismos especializados de derechos humanos de la ONU.
En este proceso, la Comisión de Derechos Humanos fue reemplazada por el Consejo de Derechos Humanos -que quedó con 47 Estados miembros-, por resolución No. 60/251 de la Asamblea General, de marzo de 2006, asumiendo todos sus mandatos, funciones y responsabilidades. Una de sus primeras nuevas funciones fue crear el Examen Periódico Universal (EPU) o Universal Periodic Review (UPR), un examen periódico entre pares. En este examen ningún país, sin importar su importancia política, militar o territorial, quedaría fuera, grandes y chicos recibirían cobertura y tratamiento equivalente. La revisión por parte del Consejo, de los Estados pares, se basa en un mecanismo cooperativo, basado en el diálogo interactivo, con la total participación del Estado evaluado. Se asegura que absolutamente todos los países miembros de Naciones Unidas sean examinados en cada ciclo, que dura aproximadamente 4 años.
El Examen Periódico Universal es, de esta manera, un mecanismo extra convencional (fuera de las convenciones) de las Naciones Unidas, ya que su creación está basada en la Carta de las Naciones Unidas, no en un tratado específico, como sí lo están los mecanismos convencionales, que son los órganos creados por tratados (entre otros, el Comité de Derechos del Niño, el CEDAW, el Comité contra la Tortura, etc).
El EPU se basa en tres documentos: un documento preparado por el Estado, que se pide sea preferentemente mediante un proceso de consulta; un segundo preparado por la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) que resume las recomendaciones de los mecanismos internacionales de derechos humanos, así como información de las agencias y organizaciones del Sistema de Naciones Unidas; y un tercero, preparado también por la OACNUDH, que resume la información proporcionada por otros actores relevantes, ya sean organizaciones de la sociedad civil, instituciones de derechos humanos, universidades u organizaciones regionales.
El documento oficial que constituye el informe dado por los Estados se prepara casi un año antes del examen que es presencial. Como el periodo entre los ciclos de exámenes es muy largo, algunos estados presentan voluntariamente un informe de medio término para actualizar datos. Paraguay lo presentó en el 2019. La información recogida y resumida en el segundo y tercer documentos preparado por la Oficina de la Alta Comisionada de Derechos Humanos también se cierra muchos meses antes del examen, debido a la necesidad de traducirla a los 6 idiomas oficiales de la ONU.
La información por otros actores no estatales (el tercer documento del EPU) representa una fuente importantísima de información, dado que los Estados, generalmente, dan datos que muestran lo positivo y se dejan sin nombrar los pendientes y las carencias. Entonces son las organizaciones de la sociedad civil las que en sus presentaciones ayudan a señalar lo que sigue siendo necesario en el Estado en derechos humanos o lo que no se ha logrado.
Para este EPU 2021 de Paraguay se hicieron 28 presentaciones por la sociedad civil. Entre estas presentaciones o comunicaciones, varias son conjuntas (Joint submissions o JS), sobre varios derechos. Entre algunas de las comunicaciones están las de Decidamos, Codehupy, la Red Contra Toda Forma de Discriminación, la Coordinadora de los Derechos de la Infancia y Adolescencia; la International Freedom of Expression Exchange (IFEX), Toronto, Canada y el Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), cátedras de DDHH de la Universidad Católica sede Asunción y de Itapúa, FAPI (Federación por la Autodeterminación de los Pueblos Indígenas), WWF –Oficina Paraguay, Asociación Guyra Paraguay, IDEA, Amnistía Internacional, la Mesa de Trabajo por los Derechos de los Pueblos Indígenas en el Paraguay, Tierraviva, Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia. Todas ellas están resumidas en la presentación “Resumen de las comunicaciones de las partes interesadas sobre el Paraguay” (1) , ya que por limitaciones de espacio (unas 20 páginas por documento en Naciones Unidas) se acortan todas las presentaciones, aunque se suben al sitio oficial igualmente in extenso en el idioma original.
Los documentos de cada país se encuentran en el sitio de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los derechos humanos, traducidos a los seis idiomas oficiales de Naciones Unidas: español, inglés, francés, chino, ruso y árabe(2).
Este último examen de Paraguay se dio en un tercer ciclo de estados examinados en el EPU, la anterior revisión fue del segundo ciclo, que le tocó en enero de 2016, y la primera revisión de Paraguay fue en febrero de 2011, en el primer ciclo de estados examinados. Los documentos por país de cada fecha, incluida la información de medio término que envía voluntariamente el Estado, así como el mismo examen, que últimamente también se graba en video, están todos a disposición en el sitio.
El examen se efectúa en un Grupo de Trabajo integrado por los 47 Estados miembros del Consejo y una Troika de países relatores designados que facilita el examen, para que se estudien y preparen los informes. (En este último EPU los 3 países designados fueron Alemania, Namibia y Uruguay, pero cambian para cada revisión). La sesión comienza con la presentación oral del Estado, y luego se produce un diálogo interactivo entre el Estado examinado y los miembros del grupo de trabajo, además de Estados observadores, donde se presentan recomendaciones y se formulan preguntas concretas, y el Estado las responde o da sus consideraciones nuevamente al final. Se tiene como resultado un informe que contiene un resumen del debate en el Consejo, las conclusiones y/o recomendaciones y los compromisos voluntarios del Estado examinado.
Hablaron en éste EPU unos 80 Estados que dieron 210 recomendaciones(3) (en el 2016 hubo 186 y en el 2011 se dieron 144 recomendaciones).
Las recomendaciones son algunas, recurrentes, en ciertos casos, de hace 10 años que todavía no se cumplieron, pero el lenguaje es siempre muy diplomático por ser de representantes estatales. Aunque el EPU visibiliza los problemas más importantes de Derechos Humanos del país, tiene por función exponer los problemas, más que hacer que se solucionen, por lo que la presión sobre éstos recaerá en el grado de movilización e interés que la sociedad tenga sobre lo que se expone.
En el año 2011 por ejemplo, en la mayoría de las recomendaciones, se pedía específicamente que se cumpla con el traspaso de tierras a pueblos indígenas en casos que ya tenían sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, lo que ya se logró.
También en el 2011 y en el 2016, se pedía el cambio de titular con mandato vencido de la Defensoría del Pueblo, con criterios de derechos humanos según los principios de París. Si bien se hizo el cambio, no se dio con los criterios de independencia e idoneidad que se pedían, por lo que continúa siendo recomendado este tema con insistencia. Chile, Finlandia, India, Indonesia, Irlanda, México, Namibia, Sudán y Ucrania fueron sólo algunos de los Estados que recomendaron al Estado paraguayo que la Defensoría del Pueblo cumpla con los Principios de París y que la selección del titular sea transparente y participativa.
Otra recomendación que desde el principio de los EPU continúa desde una gran mayoría de los Estados que hablaron en este examen es que se promulgue la Ley contra todas las formas de discriminación, incluyendo la discriminación a personas con discapacidad, a personas de pueblos indígenas, a personas con orientación sexual diferente, entre otras.
Otros temas recurrentes de varios Estados del Consejo fueron la protección de defensores de DDHH y periodistas, combatir y castigar la violencia doméstica contra las mujeres, niñas y adolescentes, en especial en este tiempo de COVID-19, y la prevención del embarazo de niñas mediante el acceso a educación sexual y reproductiva.
En el área judicial se recomendó combatir corrupción y la impunidad, y la falta de independencia del sistema judicial, mejorar el sistema penitenciario, atacando en especial la sobrepoblación por el abuso de la prisión preventiva y las malas condiciones de detención.
Se recomendó asimismo la ratificación del Protocolo facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC), que permite la denuncia de éstos derechos ante el Comité DESC.
Muchos estados felicitaron al país al principio de sus presentaciones por el sistema informático creado por Paraguay para compilar recomendaciones internacionales (entre ellas las del EPU) donde deben rendir cuentas todas las instituciones locales, con el que se hizo cooperación técnica a 7 países(4): el SIMORE (Sistema de Monitoreo de Recomendaciones) y por la legislación aprobada en el último periodo para avanzar en derechos humanos, entre otras, la Ley 5777 “De protección integral a las mujeres contra toda de violencia”.
La respuesta del Estado contó con 33 representantes estatales, 18 de las más altas autoridades de Ministerios o de otras instituciones, recalcando el representante diplomático paraguayo que 11 de estas altas autoridades eran mujeres. Queda por verse cuánto se traduce esa presencia en los compromisos y cuánto se va a avanzar en lo que dijeron éstos/as representantes ante los países de Naciones Unidas, y si esto se va a cumplir más allá de las menciones en el sistema de monitoreo de recomendaciones y en los planes interinstitucionales.
- Ver versión en español de A/HRC/WG.6/38/PRY/3
- Ver https://www.ohchr.org/SP/HRBodies/UPR/Pages/PYindex.aspx
- Ver el video del último Examen Periódico Universal de Paraguay del 5 de mayo de 2021 (de tres horas de duración) en http://webtv.un.org/live-now/watch/paraguay-review-38th-session-of-universal-periodic-review/6252743088001/?term=
- Argentina, Chile, Costa Rica, Guatemala, Rep. Dominicana, Uruguay y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, aunque en el 2016 se hicieron presentaciones del SIMORE a unos 50 países en Ginebra.
Imagen portada: Ultima Hora